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Cinco pecados capitales de la gestión financiera para pymes

Una parte importante de las pequeñas y medianas empresas de nueva creación no llegan a cumplir los cinco años de vida. En muchos de estos casos, la novedad y el desconocimiento de la gestión empresarial las llevan a cometer errores que, con el paso del tiempo, aumentan las desigualdades y desventajas respecto a las grandes compañías. Por esto, aunque parezca contradictorio, para estudiar las mejores formas de financiación de pymes, tomar sus riendas y conseguir el éxito en los negocios, el punto de inicio deben ser los fracasos previos.

Solo si se conocen los principales errores que llevan a pique la gestión financiera de las empresas, se puede crear una estrategia equilibrada. No aseguramos una victoria inequívoca, pero, al menos, encauzaremos mejor el camino del negocio.

Resumimos los cinco pecados capitales del control de la financiación de pequeñas y medianas empresas:

  • Falta de estrategia. La mayor parte de los nuevos negocios inician la actividad viviendo el momento, sin tener en cuenta los cambios que se producen en el mercado. Desde el punto de vista de las finanzas, los empresarios tienden a ahorrar en épocas de inseguridad y escasez, y se lanzan al gasto cuando las cuentas mejoran. Mantener la estabilidad en el ahorro a lo largo del tiempo siempre va a ser sinónimo de éxito.
  • Falta de reservas. Una de las recomendaciones para las economías domésticas es contar siempre con ahorros para posibles imprevistos. Este consejo debemos extrapolarlo a la gestión financiera de las pymes. Con reservas suficientes, y con la atención puesta en el estado de la empresa, podremos estimar y prever sus necesidades reales.
  • Mala gestión financiera de los beneficios. Cuando el negocio empieza a dar sus frutos, son muchos los empresarios que reinvierten todo lo que han ganado. Es un error de base. A lo largo del año, la actividad no va a ser la misma, y tendrá épocas de “vacas flacas”. Ahorra una parte de las ganancias y podrás reaccionar a cualquier imprevisto.
  • No controlar el periodo de cobro y pago. La mayor parte de las pymes que se ven abocadas al fracaso es por la falta de liquidez. Para evitar quedarse en esta situación, la recomendación es conseguir que los clientes paguen lo antes posible, mientras se retrasa al máximo el pago a los proveedores.
  • Comprar de manera compulsiva, pagar con deuda o a corto plazo. Para evitar el fracaso prematuro de la empresa, es necesario un consumo inteligente. Por eso, hay que evitar las adquisiciones innecesarias, la financiación a corto plazo de bienes con amortización a largo plazo o el recurso fácil a los préstamos para todo.

Además de evitar estos errores comunes, existen otras vías que te pueden ayudar a mantener a flote tu negocio durante largos años. Cada vez son más las empresas especializadas que ayudan a las pymes a gestionar sus cobros y pagos, controlar los gastos o administrar el equilibrio financiero general de la compañía. Si quieres conocer más sobre la financiación para pymes y autónomos, ponte en contacto con Fideco y te asesoraremos.