Principales errores en un plan de negocio
Aunque sobren ganas, no todas las ideas empresariales llegan a buen puerto. Y en muchas ocasiones, estos fracasos son responsabilidad absoluta de un plan de negocios incorrecto. Lejos de lo que pueda parecer, esta herramienta no solo es útil e imprescindible para guiar los pasos del emprendedor en su camino hacia el éxito. También constituye su mejor carta de presentación ante inversores o intermediarios financieros.
La falta de experiencia o una lista de decepciones pasadas pueden generar dudas sobre cómo hacer el plan de negocios perfecto. Para resolverlas todas y contribuir al triunfo de los buenos proyectos empresariales, en Fideco recopilamos los errores más comunes de los planes de negocios mal desarrollados.
Cinco fallos a evitar en la redacción de un plan de negocio
- Exceso de optimismo. Es lógico, y casi natural, que un emprendedor se muestre convencido y entusiasmado con su idea. Pero a la hora de desarrollar el plan de negocios, este se debe ceñir a unas proyecciones realistas, con previsiones de ventas e ingresos futuros sensatos.
- Elaborar un estudio de mercado poco profesional o no tener en cuenta los factores culturales. Tal vez la idea de negocio es novedosa y original, pero no se ajusta bien a los gustos y tendencias del público que te has marcado como objetivo. Es importante testear el proyecto en el entorno en el que se va a desarrollar, para evitar un fracaso estrepitoso.
- Olvidarse de la competencia o infravalorarla. Tan importante es tener en cuenta a la audiencia como a la competencia. La nueva empresa puede ofrecer un valor añadido sobre todas las demás. Pero, en cuanto empiecen a contraatacar, la mejor defensa es disponer de información exhaustiva sobre cada una de ellas.
- Confundir plan de negocio y presupuesto. Es cierto que el apartado financiero es uno de los que más preocupan a los emprendedores, pero no debe ser el único. Un buen proyecto es aquel que tiene en cuenta los ingresos y los gastos y los planes de financiación. Pero también debe incluir otros muchos detalles que deben hacer posible el negocio como los recursos humanos, los procesos productivos, etc.
- No tener en cuenta los riesgos. Con este fallo se cierra el círculo. Si el emprendedor peca de excesivo optimismo, puede ser incapaz de ver y calcular los riesgos a los que se enfrenta su proyecto. Lo mejor es contar con posibles altibajos y las soluciones más factibles para superarlos.
Si has salvado estos errores del plan de negocios y has sacado adelante tu proyecto de empresa, cuenta con la ayuda de Fideco para hacer frente a los problemas de liquidez inesperados. Somo expertos en servicios de descuento de pagarés y gestión de cobros desde hace más de 40 años.