¿Cuál es la máxima cantidad de dinero que se puede pagar con efectivo?
El uso de dinero en efectivo para llevar a cabo operaciones económicas es uno de los métodos más utilizados por los consumidores. Y, en este sentido, Hacienda ha establecido ciertos límites respecto a las cantidades en metálico para así luchar contra el fraude fiscal.
Como expertos en descuento de pagarés online, en nuestro post de hoy os mostramos los cambios que se han ido produciendo en los últimos tiempos respecto al dinero en efectivo.
Límites en las operaciones con dinero en efectivo
Fue el pasado julio, cuando la Agencia Tributaria redujo el límite con el que se puede operar en efectivo a los 1.000 euros máximo. Una reducción considerable respecto a los 2.500 euros que se permitían hasta entonces. Por lo que, realizar un abono en efectivo por encima de la cantidad permitida podría conllevar una multa del 25% del precio pagado de forma ilegal. A lo que la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) aconseja que, si se pasa el límite de los 1.000 euros, es preciso pagar con tarjeta o transferencia.
«Desde el 11 de julio de 2021, no pueden pagarse en efectivo las operaciones de un importe igual o superior a 1.000 euros o su contravalor en moneda extranjera, en el caso de los pagos en los que alguna de las partes actúe en calidad de empresario o profesional. Este importe se eleva a 10.000 euros en el caso de que el pagador sea una persona física que justifique que no tiene su domicilio fiscal en España y no actúe en calidad de empresario o profesional», según se detalla desde el Banco de España al respecto
Asimismo, también se restringe el dinero en efectivo que una persona puede llevar en la cartera, que no es el mismo que con el que se pueden efectuar operaciones. Según la Ley 10/2010, del 28 de abril, la cantidad que un ciudadano puede portar es de 100.000 euros. Si una persona quiere mover esa cantidad, o una superior, por el territorio nacional, es necesario declarar ese trámite. Por otro lado, cuando se trata de una salida o entrada de las fronteras españolas del extranjero, el límite se establece en 10.000 euros.
No olvidemos que la crisis del coronavirus ha traído consigo muchos cambios en nuestras prácticas cotidianas como, por ejemplo, las formas de pago. Es cierto que el uso de métodos como la tarjeta y el Bizum se han convertido en predominantes, pero el uso de dinero en efectivo sigue siendo vital para muchos sectores de la población, en especial, para las personas de edad avanzada.
Existe una brecha digital entre generaciones, pero también entre la gente que vive en el mundo rural y en las ciudades, y es que las personas mayores del mundo rural tendrían grandes dificultades para adaptarse a una nueva realidad sin efectivo. Sobre todo, en municipios de montaña donde la electricidad y la conexión llega con interrupciones y, en ocasiones, quedan suspendidos durante horas o días por cuestiones meteorológicas.